La sostenibilidad es una buena excusa para escoger tu próximo destino. Muchas veces nos decidimos a emprender el viaje porque lo hemos visto en una película, nos lo ha recomendado un amigo, o nos ha impactado un vídeo que hemos visto en las redes sociales.
Estas son formas geniales para inspirarnos a viajar y, si el destino, además, es sostenible, nos va a dar ese extra para disfrutar tanto de los paisajes y de la gente del lugar como de saber que estamos cuidando el entorno lo mejor posible.
En España hay muchos sitios sostenibles para viajar. Muchos de ellos son Biosphere, por lo que te aseguras que van a ser cuidadosos tanto con la cultura local como con los trabajadores y el entorno. Así, da gusto viajar.
En este artículo vamos a recorrer los lugares más apetecibles para visitar este año. Empecemos por el norte de la península, justo en la frontera con Francia
Pirineos
La gran cadena montañosa de los Pirineos es un destino genial si te gusta la naturaleza, caminar por la montaña y disfrutar de algunos de los picos más impactantes de Europa.
Hay rutas, como la de la famosa cascada de Cola de Caballo, o la de Ordesa y el Monte Perdido, que hay veces que tienes que pellizcarte para comprobar si estás despierto o soñando. Los lagos montañosos, las montañas con nieve durante todo el año, la suerte de poder ver la flor de edelweiss (sí, la misma a la que cantan en la película Sonrisas y Lágrimas), son solo algunos de los atractivos de acercarte a los Pirineos.
La mejor época del año para visitar esta zona es primavera y verano, pues es cuando hay más vegetación y mejor clima, lo que te permite hacer más actividades al aire libre.
Val de Aran
Este pequeño valle de los Pirineos es una gran sorpresa para el visitante, pues además de las iglesias prerrománicas, y el paisaje (que era de esperar, estamos en los Pirineos), encuentras que hay varias rutas únicas en el mundo, como por ejemplo la circular de Carros de Foc, un camino que recorre las montañas del valle y que necesitarás varios días para transitarlo.
En toda la ruta hay albergues de montaña, por lo que puedes caminar los 65 kilómetros en unos cinco a siete días.
Vitoria
Esta capital verde es una ciudad que gusta mucho al visitante, ya que además de monumentos atractivos como la catedral de Santa María (en la que el escritor Ken Follet se inspiró para escribir uno de sus libros de la trilogía los Pilares de la Tierra), o el cuidado casco antiguo, Vitoria es una ciudad con muchas zonas verdes.
Todas las avenidas tienen grandes árboles y zonas de césped, parques cada pocas manzanas, y mucho espacio entre las viviendas, dándole a la ciudad un aspecto muy humano y en la que, además de viajar, apetece vivir.
Gijón
Hay una canción de Joaquín Sabina que habla de un pueblo con mar, pues Gijón es ese pueblo con mar. Esta ciudad de Asturias se está convirtiendo en un destino turístico muy apreciado por los miles de visitantes que la conocen cada año.
Una excelente gastronomía, una calidad de vida en la que se mezcla lo mejor de vivir en un pueblo con lo mejor de vivir en una ciudad, y estar cerca de los lugares más bonitos de Asturias, como los Picos de Europa, Cudillero u Oviedo, hacen de Gijón un gran destino para disfrutar de las vacaciones en contacto con la naturaleza.
A Coruña
Seguimos por el norte para visitar una ciudad que encandila a cualquiera por su excelente gastronomía y hermosos monumentos para visitar. Lugares como la torre de Hércules, el faro más antiguo que sigue en funcionamiento, o sitios como la plaza de María Pita o el monte San Pedro, hacen de A Coruña una ciudad para visitar con calma durante varios días.
Además de la propia ciudad, que merece una visita por sí sola, a un paso te encuentras con la Costa da Morte, Betanzos, o las bonitas playas de Ferrol. Sin duda, de las mejores opciones para empezar a conocer Galicia.
Huelva y la Sierra de Aracena
En el sur de España también hay muchos lugares Biosphere, como es la provincia de Huelva. Esta zona, fronteriza con Portugal, es todo un goce para los sentidos.
El tacto disfruta del sol que acompaña durante todo el año, con atardeceres maravillosos en los que el sol se despide en el mar, que deleitan nuestra vista. El gusto está más que satisfecho por la excelente gastronomía, como las gambas de Huelva, el jamón ibérico y otras viandas de la zona que aquí es donde mejor saben. Para el oído, nada mejor que el silencio del Parque Nacional de Doñana, donde el viento susurra entre los pinos o la mar acaricia la arena con suavidad. Y a nuestro olfato le encantará la variedad de entornos, así como los vinos de la tierra de Huelva.
Sin duda, una tierra que es todo un disfrute, tanto en la costa como en la montaña, siendo la Sierra de Aracena un buen punto de partida para empezar a conocer esta provincia.
Cataluña
Esta es la comunidad autónoma con más lugares Biosphere, y es que en Cataluña saben conservar muy bien las tradiciones aprovechando todas las ventajas de la innovación.
Así, ciudades tan vibrantes como Barcelona, a la que siempre apetece ir, sea cual sea la época del año, es el primer paso para sumergirte en la cultura mediterránea. Excelentes museos como el MNAC, el Museo Picasso, el Museu d´Art Contemporani o la Fundació Joan Miró nos dan el toque más cultural, sin olvidarnos de visitar el arte modernista de Gaudí, siempre actual.
Muy cerca de Barcelona está Sitges, lugar donde disfrutar del auténtico espíritu mediterráneo de días tranquilos y buena vida. El festival de Cine Fantástico y de Terror supone una revolución todos los años, con decenas de actores, actrices y directores de todo el mundo que llegan a Sitges para mostrar las películas del año.
Siguiendo hacia el sur por la costa llegamos a Calafell, destino turístico en el que disfrutar de la playa y del mar Mediterráneo en un entorno que minimiza al máximo el impacto negativo. La reconversión turística se aprecia tanto aquí como en Tossa de Mar, el coqueto pueblo de la Costa Brava al que miles de turistas acuden todos los años para conocer cómo es una villa catalana.
Y por último tenemos Lleida, la ciudad que es la antesala a los Pirineos, donde no tenemos que perdernos la catedral de La Seu Vella, el castillo del Rey y un paseo por el centro de la ciudad.
Islas Canarias
Las Islas Canarias son un continente en miniatura, siete islas donde cada una tiene su propio ecosistema y forma de vivir. De todas ellas, hay cuatro que son destinos Biosphere, por lo que te aseguras que hay un cuidado especial por proteger el medio ambiente y la cultura local.
De estas islas Biosphere, La Palma es la más exuberante en cuanto a vida vegetal, e incluso tiene algunas cascadas, algo único en unas islas que apenas tienen precipitaciones. Sin duda, La Palma es un paraíso para disfrutar de las estrellas y de la vegetación, como puedes leer en este otro artículo.
Lanzarote es todo lo contrario. Aquí no hay ríos de agua, solo ríos de magma solidificado que le dan a la isla ese aspecto lunar. Lo que más destaca de Lanzarote es que todo está impregnado de arte, da igual que sean las casas de los campesinos o un mirador en la costa.
Por último, están las islas más habitadas del archipiélago, Tenerife y Gran Canaria, que además del paisaje volcánico y del ambiente canario, tienen ciudades donde disfrutar del bullicio, como son Santa Cruz de Tenerife y Las Palmas de Gran Canaria.
En este blog tienes varios artículos con más información sobre estas islas, así que ahora es el momento de preparar la maleta y emprender la aventura para visitar alguno de estos lugares Biosphere recomendados.