La sostenibilidad se ha convertido en un eje clave para el desarrollo del turismo en América Latina. Empresas y destinos comienzan a adoptar buenas prácticas alineadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, aunque todavía persisten desafíos como la formación, los costes o el acceso a certificaciones. Este artículo analiza los hallazgos más recientes del estudio Turtech Travel 2025 y muestra cómo el sector avanza hacia un modelo más competitivo, ético y resiliente.
Turismo sostenible en América Latina avanza hacia un modelo responsable y competitivo.
El turismo sostenible en América Latina está ganando protagonismo como modelo de desarrollo competitivo, inclusivo y responsable. Un reciente estudio publicado por Turtech Travel bajo el título "Segunda edición del Mapeo de Sostenibilidad en el ecosistema travel Latam – Versión empresas", revela que, aunque muchas empresas turísticas de la región han comenzado a adoptar buenas prácticas, aún persisten importantes retos estructurales para lograr una transformación plena.
Paralelamente, gobiernos y destinos latinoamericanos están implementando políticas innovadoras de sostenibilidad turística, impulsando la digitalización y apostando por modelos de economía circular para mejorar la gestión ambiental en sus territorios.
Este artículo resume los hallazgos más relevantes del estudio y ofrece una mirada sobre las tendencias actuales, las buenas prácticas en marcha y el papel clave de la cooperación público-privada en la promoción de un turismo más sostenible y resiliente en la región. Iniciativas como Biosphere, que apoyan a empresas y destinos en la implementación de estrategias alineadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas, representan un ejemplo de las herramientas que pueden acelerar esta transición hacia un modelo más responsable.
Claves del segundo estudio de Turtech sobre sostenibilidad turística en LATAM.
1. Adopción de la sostenibilidad en el sector turístico.
El informe, publicado en marzo de 2025, se basa en una encuesta realizada a 131 empresas turísticas de América Latina, más del doble que en la edición anterior, lo que refleja un creciente interés por integrar la sostenibilidad en la gestión empresarial.
Aunque el compromiso es evidente, los resultados reflejan una realidad compleja. Solo el 30,5 por ciento de las empresas se considera muy bien posicionada en sostenibilidad, una caída significativa frente al 47,2 por ciento del año anterior. A su vez, el 6,1 por ciento reconoce estar completamente ausente en este ámbito.
2. Percepción del turista y certificaciones en proceso.
El 26 por ciento de las empresas considera que los viajeros actuales valoran el impacto ambiental al tomar decisiones de viaje. Este dato coincide con el hecho de que el 50 por ciento de las organizaciones está en proceso de validación o ya cuenta con certificación en turismo sostenible.
Sin embargo, un 25 por ciento de los encuestados todavía desconoce los sistemas de certificación disponibles, lo que refleja una brecha informativa importante dentro del sector.
3. Educación y formación como eje pendiente.
Uno de los principales desafíos detectados es la falta de iniciativas de capacitación interna. Un 25,2 por ciento de las empresas reconoce no realizar acciones de concienciación ni formación en sostenibilidad, ni para su equipo ni para los clientes. Esta carencia impide consolidar una cultura de turismo responsable en las organizaciones.
A pesar de ello, se identifican avances notables en segmentos como alojamientos y operadores turísticos, que lideran la formación en sostenibilidad.
4. Apoyo externo y certificaciones.
El 50 por ciento de las empresas busca asesoramiento especializado o apoyo de organismos públicos para implementar mejoras en sostenibilidad. Además, el 40 por ciento ya cuenta con alguna certificación o está en proceso de obtenerla.
Estas cifras muestran una tendencia positiva, aunque persiste la necesidad de mayor difusión de herramientas y estándares reconocidos a nivel internacional, como la certificación Biosphere, que ofrece una metodología validada para medir y mejorar el desempeño sostenible.
5. Cambios en la demanda del viajero consciente.
Aunque la demanda total por productos sostenibles disminuyó levemente respecto a 2023, el segmento de viajeros altamente comprometidos creció. Un 60 por ciento de los alojamientos encuestados reporta una demanda muy alta de servicios sostenibles, consolidando esta tendencia como un eje clave de diferenciación y competitividad.
6. Retos persistentes y motivaciones emergentes.
El coste continúa siendo una barrera para muchas empresas, que temen perder competitividad ante un público sensible al precio. Sin embargo, hay indicios de cambio. El 26,2 por ciento de las organizaciones percibe que un segmento creciente de turistas está dispuesto a pagar más por propuestas responsables.
Para acelerar esta transición, el estudio destaca la importancia de reforzar las políticas públicas, ampliar la oferta sostenible desde las empresas y fomentar alianzas sectoriales que integren a todos los actores.
Desafíos y compromisos.
La sostenibilidad no es una opción, es un camino ineludible para garantizar el futuro del turismo en América Latina. El estudio de Turtech Travel muestra que el sector está avanzando, aunque de forma desigual y con importantes retos por resolver. La formación, el acceso a certificaciones, la inversión inicial y la articulación público-privada emergen como pilares fundamentales para lograr un cambio real y duradero.
Avanzar hacia un modelo turístico alineado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) implica transformar no solo las prácticas de las empresas, sino también la mentalidad de los viajeros, las políticas públicas y la forma en que concebimos el turismo como herramienta de desarrollo económico, social y ambiental.
En este contexto, Biosphere colabora con empresas y destinos de América Latina para apoyar la implementación de estrategias de sostenibilidad medibles y auditables. Su enfoque se basa en la mejora continua, con el objetivo de crear un turismo regenerativo que beneficie tanto al entorno como a las comunidades locales. Iniciativas como estas contribuyen a que la sostenibilidad no sea una aspiración, sino una realidad cada vez más presente en la región.